Mientra exista una mujer

Mientras exista la belleza.
Existimara el poema.
Mientra exista la mujer.
El hombre soñara.

Mientra exista la esperanza.
De conquistarte.
En mi pecho habrá un poema.
Habrá una ilusión.

A veces no dejas conquistarse.
Temiendo caer en brazos fácilmente
Pero en otras ocasiones diferentes.
No hay manera de poderlas alejar.

A veces se mantienen en misterio.
Tampoco se dejan descifrar
Pero a veces se entregan plenamente.
Con su cuerpo mente y corazón

La mujer como las rosas.
De la espina nos tenemos que cuidar.
Pero si sabes tratarla.
Nunca nos van ha pinchar.